La meditación es una disciplina ancestral que resulta sumamente beneficiosa tanto para el cuerpo como para la mente, ya que durante su práctica se concentra la atención en eliminar los pensamientos negativos y confusos que podemos tener acumulados y que nos producen estrés. Existen muchas formas de meditar para alcanzar esa paz mental tan codiciada y necesaria, con lo que siempre podrás escoger la que mejor se adapte a tus necesidades y a tu situación.
Saber canalizar nuestros sentimientos y pensamientos es esencial para nuestro sistema nervioso y, por ende, para nuestra salud en general. El sistema nervioso es uno de los más importantes y complejos de nuestro organismo, ya que desempeña una gran cantidad de funciones, entre las que podemos destacar el control y la regulación del funcionamiento del resto de sistemas y órganos del cuerpo humano.
El sistema nervioso está compuesto por el cerebro, la médula espinal y todos los nervios que recorren el cuerpo. Su importancia es vital, por eso debemos cuidarlo con esmero y buscar siempre lo mejor.
¿Qué relación tiene la meditación con el sistema nervioso?
Diversos estudios de prestigio internacional afirman que durante la práctica de técnicas de meditación aumenta nuestra sensación de felicidad, ya que se liberan sustancias como la dopamina y la oxitocina, también conocidas como “las hormonas de la felicidad”, que ayudan a relajar y calmar a nuestro cerebro. Este es uno de los principales motivos por lo que la práctica de técnicas de meditación es tan beneficiosa, porque potencia la relajación y la concentración.
Asimismo, la meditación favorece la eliminación del estrés, ese compañero fiel que no se separa de nosotros con demasiada frecuencia y que tantos problemas nos acarrea, tanto de salud física como mental.
Practicar meditación también ayuda a mejorar la memoria y la capacidad de aprendizaje, llegando incluso a aumentar la materia gris, lo que también supone una mejora en la capacidad de relajarnos.
Todo lo que hemos mencionado, además de muchos otros factores, nos ayudan a ver las cosas desde otro punto de vista, a ser capaces de tomar mejores decisiones y a encontrar ese ansiado equilibrio en nuestra vida diaria.
¿Cómo puede la alimentación ayudar a equilibrar el sistema nervioso?
¿Cuántas veces hemos escuchado eso de que somos lo que comemos? Pues es una afirmación bastante cierta, ya que muchos de los alimentos que consumimos (o debemos consumir) a diario aportan una serie de beneficios de gran importancia a nuestro sistema nervioso.
Alimentarse de manera saludable va mucho más allá de contar las calorías que ingerimos, ya que al ingerir alimentos le damos a nuestro cuerpo los nutrientes que necesita para funcionar correctamente. Por eso es esencial conocer los beneficios de los alimentos y adecuarlos a nuestras necesidades para poder alimentarnos de manera consciente y correcta.

¿Qué alimentos nos ayudan a equilibrar nuestro sistema nervioso?
A continuación, os vamos a enumerar una serie de alimentos muy beneficiosos para nuestro sistema nervioso. ¡Qué aproveche!
- Los frutos secos: los frutos secos son un grupo de alimentos muy nutritivos, lo que los convierte en imprescindibles de toda dieta saludable y equilibrada. Aportan una gran cantidad de energía y son ricos en vitamina E, minerales y ácidos grasos esenciales que potencian la función cerebral.
- El cacao: el cacao es un alimento rico en vitaminas y minerales que nos ayuda a crear dos hormonas esenciales para el bienestar y la felicidad: la serotonina y las endorfinas. Es importante que el chocolate contenga un mínimo de un 70% de cacao puro para asegurar su nivel de calidad y sus beneficios.
- La avena: la avena es uno de los carbohidratos complejos más saludables y nutritivos que existen y, además de aportar energía, aumenta los niveles de serotonina de manera prolongada y duradera.
- Las pipas: las pipas de girasol contienen una gran cantidad de aminoácidos, minerales y vitaminas, esenciales para el buen funcionamiento del sistema nervioso. Pero también son buenas para nuestra salud porque el hecho repetitivo de ir pelándolas una a una puede ayudar a combatir la ansiedad de manera significativa, además de ser unas magníficas aliadas cuando quieres dejarte de comerte las uñas o fumar.
- Los vegetales de hoja verde: este tipo de alimentos, como la lechuga, la rúcula, las espinacas o las acelgas contienen una gran cantidad de antioxidantes y son ricos en nutrientes que mejoran la respuesta de nuestro organismo ante el estrés, como el ácido fólico, la vitamina K y el magnesio.

- El pescado azul: esta variedad de pescado, entre los que encontramos las sardinas, los boquerones o la caballa, es rico en vitamina B y en ácidos grasos esenciales omega 3, que además de nutrir, protegen los nervios y ayudan a reducir los niveles de irritabilidad.
- El plátano: en general, comer fruta siempre es una buena opción, ya que son todas muy nutritivas y saludables, pero el plátano resulta especialmente beneficioso para el sistema nervioso debido a su alto contenido en potasio, vitamina B6 y magnesio. Es muy rica en triptófano, que da lugar a la serotonina y la melatonina (las hormonas que regulan el descanso y el estado de ánimo).
- Los lácteos: ¿a quién no le han dicho alguna vez que tomarse un vaso de leche calientes antes de irse a dormir ayuda a conciliar el sueño: Pues no es ni mucho menos una leyenda urbana, ya que la leche contiene tritófanos, que ayudan a relajarse y a mejorar el estado de ánimo.
- Las infusiones: existe una enorme variedad de infusiones que se pueden tomar tanto por separado como combinadas para conseguir un efecto mejor. Algunas tienen más componentes que incitan al descanso, como la aquilea, la valeriana, la tila, la melisa o la pasiflora. La mayoría también son buenas para hidratarse y bajas en calorías, con lo que son las perfectas compañeras de viaje.
Como has podido comprobar, existe una gran variedad de alimentos que nos pueden ayudar a equilibrar el sistema nervioso. Pero recuerda que siempre será mejor combinarlos con alguna técnica de relajación o meditación que nos ayude a reducir los niveles de tensión y estrés acumulados. La meditación, el Mindfulness y el coaching emocional pueden hacer por ti mucho más de lo que crees. Entra en nuestro sitio web y comprueba cómo podemos ayudarte.